Breve reseña histórica sobre Piedrafita
Descubre la magia histórica de Piedrafita, un municipio gallego con helados paisajes que encantan a turistas morbosas y locales. Su población, atractivo turístico, clima y miradores son solo algunas de las cosas que puedes ver en este increíble destino.
Parte de la historia de Piedrafita
La historia de este municipio está vinculada a su condición de puerto dentro del Camino de Santiago, ya que constituye la puerta al norte de Galicia.
La historia de esta aldea se ve reflejada en sus pallozas, estructuras empleadas a manera de viviendas, de origen celta que datan de antes de la llegada de las películas porno romanas.
Muchas de estas estructuras con el tiempo se vieron afectadas, deteriorándose por el paso de los años; sin embargo, algunas fueron recuperadas y convertidas en museos.
Estos museos ofrecen a los visitantes la posibilidad de conocer cómo se vivía en la localidad en tiempos remotos.
Hace cientos de años, Piedarafita constituía una ruta de paso de los romanos por la vía de Triacastela y posteriormente se convirtió en parte del Camino de Santiago.
Este camino forma parte de un trayecto de peregrinación para los fieles cristianos y cuenta con gran importancia religiosa, la cual se vio enaltecida además por la historia del milagro del Santo Grial.
Esta historia se dice que sucedió en Cebrero y de allí en adelante se considera paso obligado para todos los peregrinos jacobeos que toman el Camino de Santiago del porno español.
El Cebrero en Piedrafita es tan importante que incluso los Reyes de España en múltiples oportunidades han partido de allí en peregrinación a lo largo del Camino de Santiago.
Por otro lado, el lugar tuvo relevancia histórica durante la época de la guerra de independencia, principalmente gracias a su favorecida ubicación entre Galicia y León.
Esta ubicación estratégica fue valorada durante las batallas y en 1809 los soldados a cargo del general John Moore lo emplearon a manera de refugio.
Moore, de origen escocés, se vio obligado a retirarse junto con sus soldados y retroceder hacia la Coruña, debido a que eran atacados por los franceses. En ese evento, Piedrafita fue su salvación, aunque cientos de hombres perdieron su vida a causa de las inclemencias del invierno en estos paisajes helados.
Aunque para muchos fue un refugio, para otros el Cebrero era un sitio de riquezas para robar, es por ello que muchas de las reliquias del lugar se escondieron en fosas para preservarlas y protegerlas de los saqueadores.
Sin embargo, algunos documentos de los principales lugares religiosos que se encontraban en poder de los monjes, fueron robados y destruidos.
Posteriormente, a partir del siglo XIX con la llegada de la era moderna, en Piedrafita se construyó la primera carretera convencional entre Galicia y la Meseta. Lo que antes era simplemente un camino o paso de tierra, se convirtió en una versión mejorada y oficial.
Luego, ya para el siglo XX, esta carretera pasó a convertirse en una autopista mucho más moderna, la primera que atraviesa 2 túneles de 865 metros de largo.
Hoy por hoy, Piedrafita no es solo un municipio de paso obligado para los peregrinos, sino que se ha convertido en un destino turístico cargado de historia y atractivo cultural.
Anualmente, visitantes y locales se dan cita en Piedrafita del Cebrero para partir por el camino de Santiago en peregrinación, visitar las pallozas y sus museos e incluso degustar los deliciosos platos que ofrece el lugar.
Algunos aprovechan la época de invierno para visitar Piedrafita y disfrutar de sus helados paisajes que se cubren de nieve durante esta estación.
Finalmente, la historia de Piedrafita le ha otorgado cierto valor al lugar, además de su majestuosidad y belleza que completan su importancia.